Hoy nos vamos hasta la República Checa para proponeros esta ruta por Praga, en concreto una ruta por la Ciudad Vieja de Praga, la zona conocida como Stare Mesto. Además, también pasaremos en esta ruta por el barrio Judío de Praga.
Como punto de inicio y punto final de esta Ruta por Praga he escogido la plaza Stare Mesto, la plaza más importante de Praga, situada en pleno centro del casco antiguo de la ciudad. Esta plaza está completamente rodeada por edificios históricos y palacios. La plaza de la Ciudad Vieja de Praga es uno de los espacios públicos más bonitos de Europa. Merece la pena dar una vuelta andando a la plaza mirando todos y cada uno de los edificios.
La ruta a pié tiene un recorrido de unos 4 kilómetros y pasa por los puntos más relevantes de la Ciudad Vieja de Praga, además de acercarnos brevemente a la Plaza Wenceslao por su importancia política y social en los últimos años de historia de la ciudad. También pasearemos por el antiguo Barrio Judío de Praga.
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Ruta por Praga: la Ciudad Vieja
Vamos a comenzar nuestra ruta por Praga en la Plaza de la Ciudad Vieja, donde merece la pena tomarse nuestro tiempo para poder ver los edificios con calma. Esta plaza es espectacular, en ella destacan varios edificios por su altura, como son la Iglesia de Nuestra Señora de Tyn y el Ayuntamiento. Además, en la fachada del Ayuntamiento podrás ver uno de los elementos más emblemáticos de Praga; el Reloj Astronómico del siglo XVI. También hay que hacer una mención para el reformador religioso Jan Hus, importantísimo para la historia de la ciudad y que tiene un monumento en la plaza.
Iglesia Ntra. Señora de Tyn: de estilo gótico, esta iglesia domina la plaza y destaca en casi todas las vistas de la ciudad por sus altas torres y sus llamativos chapiteles. Uno de los aspectos más curiosos de esta iglesia es lo difícil que resulta encontrar la entrada. Para acceder a ella tendrás que pasar bajo los soportales del edificio que están justo delante, en la plaza, aunque veas que esta todo lleno de mesas de las terrazas de los bares no te preocupes, se entra por ahí.
Ayuntamiento de Praga: está formado por un edificio principal (la torre) y por varias casas que se fueron anexionando conforme el consistorio necesitaba más espacio. Se puede subir a la torre del Ayuntamiento de Praga (5€ aprox.) que mide unos 70 metros. Desde allí tendrás unas espectaculares vistas de la plaza de la Ciudad Vieja y de toda la ciudad. En la facha del Ayuntamiento antiguo podrás ver el famosísimo Reloj Astronómico de Praga, del que cuenta la leyenda que, tras su construcción, los concejales decidieron dejar ciego al relojero para que no repitiera su magnífica obra.
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El reloj astronómico es todo un acontecimiento en la plaza, cada vez que marca las hora en punto se pone en marcha y el lugar se llena de gente para verlo funcionar. Además de marcar las horas, este reloj muestra las órbitas del Sol y de la Luna alrededor de la Tierra (sí, este reloj fue construido cuando todavía se creía en el geocentrismo y que la Tierra era el centro del Universo) . A las horas en punto se pone en marcha el mecanismo más llamativo del reloj: en la parte alta se produce la procesión de los doce apóstoles, que comienza con un esqueleto (la muerte), girando un reloj de arena y tirando de una cuerda. Al final de la procesión, canta el gallo que marca la hora. Otras figuras animadas del reloj, cargadas de simbolismo, son «El Turco» que mueva la cabeza hacia los lados, «La Vanidad» se mira en un espejo, y «La Avaricia» representada por un prestamista judío.
Tras ver el reloj, ya sea en funcionamiento o no, vamos a continuar nuestra ruta por Praga saliendo de la plaza. Subimos por la calle Zelezna, calle peatonal y repleta de negocios, para llegar hasta la Plaza Wenceslao. En el camino nos encontraremos con el Teatro de los Estados, donde Mozart estrenó Don Giovanni y donde trabajaron muchos otros artistas. También pasaras junto al Carolinum, edificio de la Universidad Carlos, y del que queda un impresionante balcón.
Una vez que lleguemos a la Plaza Wenceslao (que parece una calle) podrás ver al fondo el Museo Nacional de Praga. En esta plaza de unos 750 metros han tenido lugar numerosos sucesos de carácter social y político del siglo XX: exhibiciones militares durante la ocupación Nazi, en 1969 tuvo lugar la Primavera de Praga con protestas por la ocupación soviética (suicidio de Jan Palach prendiéndose fuego) y por último en 1989 la Revolución de Terciopelo.
Volvemos ahora hacia la Ciudad Vieja para ver la Torre de la Pólvora. Desde allí volvemos hasta la Plaza de la Ciudad Vieja por la calle Celetna, una de las más recorridas de la ciudad.
Desde la plaza de la Ciudad Vieja, seguimos nuestra ruta por Praga y nos vamos a dirigir ahora hacia el Barrio Judío de Praga, donde, como mínimo, tendremos visita obligada a dos lugares; la Sinagoga Española y la Sinagoga Pinkas – Cementerio Judío. Otro lugar interesante es la Sinagoga Staronova (o sinagoga Vieja) y la leyenda del Golem. Por supuesto hay más sinagogas y otros lugares de interés en el bario Judío, pero estos son los más destacados.
Merece la pena visitar las sinagogas del barrio Judío de Praga. La Sinagoga Española, llamada así por su arquitectura morisca que recuerda construcciones españolas como La Alhambra, tiene un interior espectacular y muy decorado. Junto a la puerta de la sinagoga, en la calle, podrás ver una escultura de Frank Kafka, es el escritor más conocido de Praga.
En nuestro camino pasaremos por la calle Parizca, desde la cual, si miras sobre el puente que cruza el río Moldava podrás ver un Metrónomo gigante. Este metrónomo sustituyó a la gran escultura de Stalin que se encontraba allí, y que volaron por los aires con explosivos. Saber más sobre la escultura de Stalin en Praga.
Pero si hay un lugar destacado en el barrio Judío de Praga es sin duda el cementerio. Se accede al cementerio por la Sinagoga Pinkas, ahora memorial por los judíos checos que sufrieron el holocausto. Durante más de 300 años a los judíos sólo se les permitía enterrar a sus difuntos en este lugar. Debido a la falta de espacio, los cuerpos comenzaron a enterrarse unos encima de otros y por eso tiene una altura muy superior a la de la calle. Se cree que hay enterrados unos 100.000 cuerpos.
Salimos del cementerio y continuamos esta ruta por Praga y su Ciudad Vieja. Ahora nos dirigimos hacia el río Moldava donde veremos el Rudolfinum, sala de conciertos de estilo renacentista. Fue sede del parlamento Checoslovaco y también sede de los Nazis durante la II Guerra Mundial.
Continuamos nuestra visita. Ahora vamos a continuar por la calle junto al río (cuidado con los tranvías y los coches) hasta llegar al Puente Carlos, uno de los puentes más conocidos y espectaculares del mundo. Todavía no vamos a cruzar los 520 metros del puente construido en 1357, eso lo haremos cuando vayamos a hacer una visita al barrio de Mala Strana (el barrio del Castillo de Praga), pero sí que podemos ver su torre y algunas de las esculturas.
Desde el puente vamos a volver, de nuevo, siguiendo nuestra ruta por Praga, a la plaza de la Ciudad Vieja. Vamos a volver a la plaza por la calle Karlova (Carlos), una de las calles que más me gustan de Praga. En general esa zona entre el puente y la plaza me gustan mucho por las calles estrechas y la vida que hay. Por cierto, en esta zona hay varios locales de teatro negro de Praga, uno de los espectáculos más típicos de la ciudad.
Por último llegamos a la plaza de la Ciudad Vieja pasando otra vez por el Reloj Astronómico, el cual tienes que ver a las horas en punto para verlo en funcionamiento.
Hasta aquí nuestra ruta por la Ciudad Vieja de Praga. Esperamos que te sirva y te ayude en tu próxima visita a la capital de la República Checa. Por supuesto eres libre de adaptarla y de añadir lugares interesantes, si lo haces, no dudes en contárnoslo dejando un comentario.
